La Tripulacion

Saga y Cecilia se conocieron en Rosario, Argentina. Saga recién llegaba de dar la vuelta al mundo en un barco de 43’ y con su espíritu aventurero cautivo a Cecilia. Juntos decidieron partir al Mediterráneo para trabajar a bordo de veleros y así hacer de su pasión su trabajo.

En el 2004 llego Inés, en el 2005 Martín y en el 2008 Tomas.

Y en el 2010 llego el Express Crusader. Nuestro sexto integrante de la familia, dispuesto a llevarnos a recorrer el mundo, descubrir cosas en familia y sobre todo descubrirnos nosotros. Y como toda singladura, abiertos a disfrutar lo que toque.

jueves, 19 de enero de 2012

Hoy nos despertamos con sirenas


Hoy nos levantamos con sirenas pero de la policía del aeropuerto. A las 8.30 la sirena de un coche del aeropuerto nos llamaba desde la playa pidiéndonos que nos moviéramos porque entorpecíamos el aterrizaje. Estábamos en el lugar ideal salvo que se ve que molestábamos a los aviones que aterrizaban a pocos metros nuestros. Ay, la felicidad nunca es perfecta…
La bahía está bien protegida del viento y mar que hubo estos días y no había nadie salvo un barco fondeado y cerrado dentro de una laguna rodeada de corales. La playa está llena de palmeras y el agua es muy tranquila, una pileta. Tomás es quien mas la aprovechó, cada día se suelta más a nadar. Jugamos con Victoria, Sofía y los chicos a Marco Polo y estuvo buenísimo.
Y además, teníamos Wifi de unas casas de veraneo que había cerca. Saga, como siempre, se fue a averiguar la clave y conoció al conserje que era súper simpático. Cada conexión a Internet la aprovechamos al máximo. El tiempo vuela entre subir fotos, mandar mails, hablar por Skype con los abuelos e intentar leer alguna noticia para tratar de estar colgados de nuestra palmera de una forma mas informada, ja!
Ayer por la mañana se desembarcaron nuestros amigos. Saga los llevó con el dinghie hasta la playa y ahí los buscó el taxi que habíamos pedido para ir al aeropuerto. Y después de eso diluvió. Fue el primer día completo de lluvia y vino bárbaro. No solo porque teníamos Internet sino porque necesitábamos todos un poco de vida de a bordo. Lo disfrutamos muchísimo.
A la tardecita, la hora de la peli, nos tocaba elegir a Saga y a mí y yo primero vi un capítulo de House. Pensé que los chicos no iban a durar ni dos minutos y se lo tragaron de lo mas fascinados. Nunca habían visto nada “de mayores” y las preguntas no paraban. Y después vimos Wall Street 2. Y también nos inundaron con preguntas. Inés se emociona con cualquier cosa. En una parte que la hija se amiga con el padre la miro a Inés y estaba llorando! Cada día está mas Susanita (la de Mafalda).
Y hoy, después de levantar el ancla, nos volvimos para Bitterend que está bien protegido.
Cuando llegamos, los chicos se tiraron al agua y cumplieron con la tradición de a bordo de ir a tocar la cadena del ancla. El que toca la cadena se gana un helado. Esta vez Tomás me pidió el chaleco salvavidas y quiso ir conmigo. Y como iban todos nadando hasta la playa él se animó a seguir viaje así que fuimos y vinimos nadando juntos.
A bordo hicimos una comida ligera de arroz con brocoli y huevo duro y después volvimos cada uno a lo suyo. Los chicos se fueron al agua con esponjas para limpiar el casco, Tomás juntó sus coches y empezó sus carreras, Saga haciendo el service al generador y yo…bueno, justo ahora estoy escribiendo pero no paré de trabajar!

No hay comentarios:

Publicar un comentario